Acaba de empezar la primavera y muchos ya comienzan a agobiarse con los kilos de más, los michelines y el momento dramático de ponerse frente al espejo en bañador. Es una lástima que una época tan bonita y saludable esté tan explotada desde el punto de vista de la estética. Yo prefiero proponerte un plan mucho más atractivo: prepararte para que disfrutes de lo más sano, lo más refrescante y lo más sabroso del verano.
La Operación Bikini sólo es un invento comercial
Superada la crisis que se produce cada mes de enero con los propósitos de año nuevo, toca sacar del fondo del cajón los complejos y las inseguridades. Ésa es la realidad: han pasado tres meses y lo cierto es que no has hecho nada por dejar de fumar, practicar más deporte o empezar a comer de manera saludable.
¿Ya te habías olvidado de ello? No te preocupes, las redes sociales y los medios de comunicación harán su trabajo para recordártelo. Y también te meterán prisa para que aproveches estos meses antes del verano y consigas metas imposibles con estas pastillas, aquella crema o “la famosa dieta de…”. No caigas en el error. Hay un modo más sencillo y saludable de afrontar los cambios con respecto a tu salud nutricional.
Olvídate de la Operación Bikini, de dietas milagro y de esos carísimos productos que tan bien le han funcionado a ese cantante tan famoso o a esa actriz tan popular. El éxito de la pérdida de peso y de un buen equilibrio entre los porcentajes de grasa, músculo y agua de tu cuerpo no forma parte de ninguna estrategia comercial. Es el núcleo de la nutrición inteligente, y yo te voy a ayudar a descubrirla.
Adelántate a las tentaciones del verano con un buen plan de ataque
Por supuesto que a todos nos gusta sentirnos atractivos, subirnos sin problema la cremallera de ese vestido que no nos ponemos desde el año pasado o lucir sin complejos nuestro cuerpo cuando vamos a la playa. Pero las cuestiones estéticas no son el objetivo principal. Son la consecuencia de un plan de acción nutricional basado en el trabajo, la constancia y la educación.
Piensa que cuando me visitas en mi centro de nutrición es como si fueras a clase. Mi intención es que salgas de la consulta con la lección aprendida y con las dudas resueltas para que en casa dispongas de todas las herramientas para llevar a cabo tu tarea. Y tu tarea es la de tener una despensa repleta de productos sanos, un menú apetecible para cada día y un propósito realista, ajustado a las particularidades de tu metabolismo.
Durante estos meses previos al verano tenemos una oportunidad estupenda para trabajar en todos esos malos hábitos que durante las vacaciones tienden a descontrolarse. Sí, es un buen momento para perder los kilos de más y garantizar que tus niveles de autoestima en la playa estarán en lo más alto. Pero también es el momento de empezar a pensar en salud, no sólo en imagen.
Proponte una meta para toda la vida
Vamos a trabajar paso a paso, semana a semana. Si desde el primer momento nos planteamos una meta muy distante, acabarás agobiándote y tirando la toalla antes de que reabran los chiringuitos de la playa. No cuentes los días: cuando se hacen las cosas de un modo profesional, hay tiempo de sobra.
Lo primero que haremos será valorar tu situación actual y qué tal estás tratando a tu cuerpo desde los atracones de Navidad. A partir de ahí, toca diseñar un planning de alimentación que se adapte a tus necesidades nutricionales y que, de manera progresiva, te permita plantarle cara a esos kilos que no deberían estar ahí.
¿Qué queremos obtener de cara al verano? Es importante que tengas claro el objetivo porque, una vez que haya finalizado septiembre, éste tiene que seguir presente en tu día a día. Si nos ponemos a trabajar desde ahora con compromiso y motivación, antes de verano ya empezarás a notar cambios favorables en tu aspecto. Durante el verano estarás tan ilusionado que no estarás dispuesto a abandonar los buenos hábitos aprendidos. Y una vez que acaben las vacaciones, sentirás que el plan de alimentación en el que hemos estado trabajando ya forma parte de tus rutinas así que, ¿por qué abandonar algo que te funciona tan bien?
El verano está para disfrutarlo. Para que puedas tomarte sin remordimientos ese helado tan apetecible, para que te sientas a gusto cuando te pones el bañador y para que en tu mesa nunca falten los alimentos más sabrosos y refrescantes de la temporada. Si no quieres que tu dieta estival se convierta en una limitación en tu vida social, puedo echarte una mano. Todavía estamos a tiempo de reconducir tus hábitos alimentarios, aprender a comer bien sin perder el control y garantizar una imagen con la que te sientas a gusto.
Sherlene
He leído con gran interés su artículo sobre Aprende a Comer
y Disfruta Sin Complejos del Verano y puedo decir que es uno de los mejores artículos que he leído.
Es por eso que quiero compartir un sitio web que me ha
ayudado mucho a perder peso, y ahora estoy feliz de nuevo